lunes, 16 de marzo de 2015

Cosas raras

Fue extraño, fue como el cliché de una película de terror. Mientras me bañaba, sentí que algo me tocaba la espalda. Y decidí ignorarlo, error de mi parte porque acto seguido aquella "cosa" que me tocaba, subió por mi espalda, casi llegando a mi hombro. Me congelé, y rápidamente mi cabeza para ver que era. Y fue sólo cuestión de segundos, hasta que pudiese percatarme de que lo que tenia en el hombro parecía ser una mano, o algo extraño similar a eso. No dure dos segundos que pegué un salto. Y volví a congelarme. El corazón me latía a mil, no cabían las piezas en mi cabeza para reaccionar o hacerme creer que eso no fue real. Porque...no lo fue, verdad? 

Hasta ahora tengo esa duda. Y creo que tendré miedo a bañarme la próxima vez... Shumbi mugrosa! bueno no, debe ser producto de no haber dormido casi nada, eso afecta mucho al cerebro (? Así que niños...duerman. Duerman tranquilos..



Un inicio

Podría esta ser una red social más, en la cual descargue mi ira, tristeza, o mis arranques de felicidad. Pero no... Salgamos un poco de la rutina, eso hago en todas las redes sociales. Solamente profundizaré aquellas sensaciones que callo. Aquellas pesadillas que no me animo a decir, y a expresar mis análisis que hago del mundo. 

19 años, estudiante universitaria, en una relación, futura artista visual, futura peluquera, inestable, trastorno límite, trastornos alimenticios, ataques de egocentrismo, pesadillas constantes, virginiana, analítica, promiscua, bailarina frustrada, amante de los gatos, amante del café, dulces en cantidades galácticas, una estrecha y cercana relación con el whisky y el vino. 

Y bueno... Ya habrá más tiempo para explayarse.
Pero mi gran duda en este instante es ¿Cuándo se me irá ese miedo a dormir? Aunque el miedo no es exactamente a dormir, sino a tener pesadillas, no hay noche que no tenga al menos una. Y aunque no las recuerde al despertar, uno sabe que fue un mal sueño, al sentir el corazón a mil, y una extraña sensación de tristeza y ansiedad.